Hoy he leído que un grupo sueco está trabajando ya y probando implantarse un chip bajo la piel para por ejemplo:
– Acceder a un edificio (fichar entrada y salida)
– Utilizar la fotocopiadora.
– Pagar un café….
La noticia me ha parecido curiosa porque bajo mi punto de vista eleva la utilización que hacemos de la tecnología y con ello los comentarios a favor y en contra de dichos avances tecnológicos.
La noticia
En principio el chip se colocaría en la mano, entre el dedo pulgar e índice y no sería mucho mayor que un grano de arroz.
Como vemos en la imagen el chip es implantado por un tatuador.
La idea del uso del chip al margen de acceso a edificios corporativos a modo de fichaje, etc, sería que se pudieran pagar otro tipo de servicios, como un café en un bar, el billete del bus, tren, etc…
Y tu, ¿dejarías que te implantasen un chip?
Está claro que la tecnología avanza rápidamente y que no querer subirse al tren es quedarse fuera de la realidad, aislado en cierto modo. Pero a todos estos avances les separa una línea muy fina del derecho a la intimidad/privacidad de las personas y ahí es donde las personas más detractoras de dichos cambios tecnológicos ponen el grito en el cielo.
Personalmente pienso que deberán avanzar mucho más en el uso de dicha tecnología para que no se quede solo en abrir y cerrar puertas o incluso en pagar ciertos servicios (que ya podemos hacer incluso desde el móvil sin sacar la tarjeta de crédito), pero si logran avanzar en ese aspecto creo que puede resultar una tecnología muy implantada.
Debemos ir pensando en la Ley
Ahora sería el momento de ir aceptando dicha tecnología y pensar en los cambios legales que deberíamos hacer para proteger nuestros derechos como ciudadanos y no esperar a que se implante definitivamente y nos toque ir por detrás como nos pasa siempre.
Os dejo aquí uno de los enlaces donde se habla de la noticia que os he comentado y que me ha parecido más interesante: